viernes, 5 de noviembre de 2010

Una boda, no sé si normal, con una alfombra claramente roja







Los que me conocen saben de sobras que no se me da muy bien eso del Gossip, que me cuesta mucho almacenar los nombres de las personas que salen en las portadas de las mejores revista, o de las que provocan escándalos o comentarios de buen ver.  Pero también saben de sobras que no puedo resistirme y entretenerme mirando los vestidos y complementos de las mismas mujeres y hombres de cuyos nombres no puedo acordarme.

Hace unas semanas que se celebró la boda de Rafael Medina y Laura Vecino, no sé si los invitados se lo pasaron bien o mal puesto que no me habían invitado, pero debo decir que la cosa pintaba muy bien. Pero objetivando el destino de este post, procedo a comentar algunas personalidades que pisaron la alfombra roja, de hecho, las que me produjeron mayor satisfacción.

Para empezar, dicho compromiso constaba de un protocolo muy marcado.  Las mujeres debían llevar vestido por encima de la rodilla, y los hombres un distinguido chaqué. Entre las cara que se vieron destaco a Marisa Borbón luciendo un Christian Dior azul con lunares blancos y bolso Loewe, Valeria Mazza con un corto de lentejuelas doradas de Alberta Ferretti y abrigo Versace, Eva Herzigova saltándose el protocolo, con un largo tobillero de Cavalli y Carla Goyanes  portando un muy muy corto Bluemarine y chaqueta Etro.
Y ahora mis preferidas: Nieves Álvarez con Chanel. Concha Lastra con Oscar de la Renta. Alejandra Royas con Giambattista Valli. Amaia Salamanca con Diane Von Fürstenberg.






Debo decir que si a mí me hubieran invitado, creo que hubiera lucido este Dior de la colección crucero 2010-11.


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