¿Tengo, tienes, tiene estilo?

Hace tiempo que le doy vueltas a la misma pregunta ¿qué es tener estilo? Vivo en Barcelona, y concretamente, trabajo en la zona reconocida como “alta” en la que puedo observar a múltiples chicas y mujeres que parecen copias unas de las otras. ¿Qué las caracteriza? Los grandes bolsos de Louis Vuitton, Carolina Herrera y las más caprichosas, Lowe o Chanel. Puedo ver camisetas y jerséis con un gran DKNY o un caballo de Ralhp Lauren estampado, y siempre me viene la misma pregunta a la cabeza, ¿Cuánto deben cobrar por hacer esta publicidad? Obviamente la respuesta es NADA.

Así pues, ¿qué es lo que se busca con estas marcas? Diseño, calidad, ir a la última, o tal vez sea reconocimiento social… sea lo que sea para mí el estilo es mucho más que eso, sentirte bien con lo que llevas puesto, poder tener una propia identidad que no esté atada a ninguna marca y en especial, es poder ser fiel a uno o una misma.

El jueves pasado leía una entrevista del 2009 de Brenda Chávez, periodista y especialista en moda, fotografía y arte entre otras, a David Delfín, diseñador de la firma Davidelfín. Éste le hablaba sobre que es para él tener y no tener estilo, y reconocía por todo lo alto a Bimba Bosé, modelo, apuntando que se podía poner lo que quisiera ya que el porte con seguridad hacía rebrotar la elegancia y cómo no, el estilo. Justo después de leer esto, recordé que hace ya unos cinco años en el aeropuerto del Prat vi a una chica que vestía unas mayas negras acampanadas conjuntadas con un ancho cinturón de cuero marrón, sandalias y una camionera rosa palo con delicadas lentejuelas, le quedaba tan bien… cuando llegué de mi viaje, intenté hacer esa misma combinación, me quedaba tan mal…

Creo que en realidad el estilo se hace, no se nace. Se debe tener criterio, conocerse el cuerpo, las medidas. Respetar con que se siente uno mejor y no dejarse llevar por los “in” de las revistas. El estilo es un estado de ánimo, es el encontrar la razón, como Platón describía en el Mito de la caverna.

Así pues creo que tenemos que ser estilosamente nosotros y nosotras, sin máscaras de caballitos ni cocodrilos. Pero esto son sólo ideas que me llevan a la razón de llevar hoy una falda vintage con altos tacones y mañana a pasearme por el Moll de la fusta en deportivas, a la vez que no puedo dejar de embelesarme con las pasarelas de estas mismas firmas.